Entrega de vituallas.- La ayuda llegó de inmediato. El INFA, a través de su Directora Provincial, Enriqueta Pulla y su equipo de técnicos, participó del operativo de evacuación y entregó sábanas, colchas, medicina y alimentación para unos diez días a la familia afectada.
Familia afectada lluvias.- Primeras víctimas del fenómeno del niño. La familia Mesa Castro, de 7 miembros, oriunda de Esmeraldas y que habita en una precaria vivienda en la ciudadela Los Vergeles de Machala, fue evacuada hasta la instalación de la iglesia del lugar.
PASAJE ( Marco Montaño).- Una llamada a la media noche de anteayer activó un operativo del INFA para acudir en apoyo a los socorristas de la Secretearía de Gestión de Riesgos (antes Defensa Civil) y llegar con ayuda a los primeros afectados por la intensa y prolongada lluvia que inundó Machala y el resto del litoral ecuatoriano.
Un equipo de técnicos, encabezado por la Directora Provincial del INFA, Enriqueta Pulla y Marco Reinoso, Jefe de la Secretaría de Gestión de Riesgos, se movilizó de inmediato para ubicar albergues y entregar colchas, sábanas y medicina. La acción que duró hasta las 3 de la mañana permitió evacuar a la familia Mesa Castro, de 7 miembros, cuya frágil vivienda, ubicada en la Ciudadela Los Vergeles, al norte de la ciudad, fue inundada por la tormenta y su techo destruido.
Horas antes, el equipo de apoyo había respondido a dos llamados de auxilio, uno al noroeste de la ciudad y otro en la comunidad de Corralitos, cuyos reportes enviados a la Defensa Civil, a través de la policía, resultaron falsos.
Manuel Mesa Congola (37) y Tita Castro Collar (35), oriundos de Esmeraldas, y sus 5 hijos (nombres protegidos) menores de edad (13,9, 7, 3 y 8 meses) ocupaban una chalet de ladrillo ubicado a dos cuadras del destacamento de policía, diagonal a la capilla del sector marginal de Machala. “El aguacero tiró abajo el techo y el agua nos llegó hasta la rodilla, se mojaron todas las cosas y mis asustados hijos se temblaban de frío”, dijo la acongojada madre.
Los afectados fueron trasladados provisionalmente hasta el destacamento de policía del lugar para pasar la noche y sus enseres fueron embarcados en el camión de la Secretaría de Gestión de Riesgos para su cuidado. En horas de la mañana el equipo del INFA retornò con colchas, sábanas, pañales para los niños y alimentación para toda la familia para el lapso de ocho días. Mientras los Socorristas de la Defensa Civil reubicaron a los afectados en una sala de catecismo de la capilla, cedida por 15 dìas por el párroco de la zona y la comunidad religiosa de Las Marianitas.
Enriqueta Pulla aseguró que en los casos de emergencia el INFA pone a disposición su red de Centros de Desarrollo Infantil-CDI- (llamados guarderías) de toda la provincia para que sean adaptados como albergues; también cuenta con un lote de vituallas y medicina para entregar a los afectados, previo al análisis del caso.
Pese a que la acción fue oportuna la Directora del INFA dijo que debe ser más efectiva si se corrige la improvisación y la falta de coordinación interinstitucional en la respuesta ante las emergencias. “Esto impide llegar oportunamente con ayuda integral y solucionar el problema de los afectados. En la acción de socorro de la madrugada, la familia afectada no pudo ocupar un plantel educativo porque el conserje se negó abrir la puerta y la comunidad puso dificultades para que ocupe la casa comunal”.
“Es nuestro deber actuar en estos casos con sentido de urgencia, pero hay que hacerlo planificadamente, no quedarnos en la acción emergente sino dar seguimiento a los casos de los afectados hasta que hayan sido atendidos totalmente”. Concluyó Pulla.
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